Garantías de carretillas elevadoras: cómo aprovechar las oportunidades

¿Comprar una garantía extendida es una protección razonable o un despilfarro de dinero? Aquí le presentamos siete preguntas que debe hacerse a la hora de elegir.

¿Le gusta arriesgarse? Algunas veces jugamos a la lotería o apostamos sobre el resultado de un encuentro deportivo. ¿Pero haríamos lo mismo con nuestro negocio?

Algunas personas comparan las garantías extendidas con una apuesta: ¿Qué probabilidad hay de que algo vaya mal? ¿El riesgo justifica su coste? ¿La compro o asumo los riesgos? ¿Cubrirá el componente que se averíe?

Con una inversión importante, como en una carretilla elevadora, la apuesta es alta. Si algo va mal y no tiene garantía, los problemas pueden agravarse rápidamente. Perderá su valioso tiempo en intentar solucionar las cosas. Mientras tanto, su carretilla seguirá averiada, durante días o incluso más tiempo. La carga de trabajo se acumula y los clientes se sienten molestos. El estrés y los costes se disparan.

Por eso, ¿debería contratar siempre la máxima garantía que ofrece el concesionario?

Depende.

Arriba: garantía extendida de cinco años para el tren de potencia que ofrece Mitsubishi. Lea sus condiciones y verá que incluye más coberturas que otras garantías extendidas, incluyendo la de ‘reclamación máxima ilimitada'.

¿Hay algo peor que no tener una garantía extendida?

Respuesta: tener una mala garantía extendida, que no ofrezca las coberturas que esperaba. Cuando ocurre esto, paga y pierde. La letra pequeña puede tener importantes consecuencias.

El mejor método es considerar la garantía extendida como parte de la compra de su carretilla elevadora. Podría ser tan importante como el motor, el sistema hidráulico o los ejes, por lo que debe examinarla con la misma atención.

¿Qué debe buscar? Esta lista le ayudará a encontrar la mejor garantía extendida.

1) ¿Quién ofrece la garantía extendida?

A veces estas garantías las ofrecen terceros, como las compañías de seguros. Sin embargo, las mejores están avaladas por el fabricante. Esto es una buena indicación de que hay pocas probabilidades de que le ocurra algo a la carretilla, pues el fabricante está dispuesto a asumir el riesgo — También demuestra que está interesado en una relación a largo plazo con el cliente, basada en la confianza, y no en una venta rápida para luego desaparecer.

2) ¿Cuál es la cobertura?

Las piezas y la mano de obra deben estar incluidas. De esta manera, los costes y los riesgos están cubiertos por la póliza. Los principales componentes (es decir, los más costosos) deben estar cubiertos, con la opción de incluir las baterías si la carretilla es eléctrica. También es importante que se cubran los daños causados a la carretilla por cualquier avería, y no únicamente el problema en sí. (Sin embargo, es improbable que la garantía cubra filtros y otras “piezas desgastables”.)

3) ¿Cómo se proporciona?

Necesita una póliza que le ofrezca piezas de alta especificación garantizadas y homologadas por el fabricante, no imitaciones baratas que se rompan cuando venza la garantía extendida. La cobertura debe incluir a técnicos cualificados autorizados a trabajar en la carretilla. Esto tendrá como consecuencia reparaciones más rápidas y fiables. También es importante que los talleres tengan experiencia y un adecuado inventario de piezas, a fin de evitar retrasos y pedidos de componentes equivocados.

4) ¿Hay algún límite de costes?

Imagine que la póliza solo cubre una pequeña parte de la factura, que asciende a una cantidad importante. Para evitar sorpresas, asegúrese de que la garantía no tenga un límite en cuanto al valor de la reclamación ni en cuanto al número de reclamaciones que puede cursar con relación a una carretilla. Compruebe también que no haya una escala en virtud de la cual el valor decreciente de la carretilla afecte al nivel de protección.

5) ¿Cuál debe ser su vigencia?

Es obvio que una carretilla sometida a un uso intensivo durante tres o cuatro años necesitará más atención que una de solo unos meses. Esto significa que el valor de cada año de cobertura no es idéntico: cada año adicional de una garantía extendida es más caro que el anterior. Algunas garantías extendidas ofrecen más flexibilidad al vincular la cobertura a la intensidad de uso de la carretilla (medida en miles de horas).

6) ¿Vale lo que cuesta?

Cuando compre una carretilla elevadora, no compare su precio básico y piense después en la garantía; añada los costes de una garantía extendida completa para cada carretilla y después vuelva a comparar los modelos. Estos cálculos representarán más fielmente el verdadero coste de explotación. El precio de algunas garantías extendidas puede ser abusivo otras, en cambio, pueden resultar muy razonables, con el mismo valor mensual que un par de litros de aceite del motor. (Nota: algunos concesionarios incluyen una garantía extendida en el momento de firmar un contrato de alquiler. Han hecho los cálculos y saben que las coberturas, avaladas por el fabricante, son rentables.)

7) ¿Es transferible?

A menos que vaya a utilizar la carretilla elevadora para siempre, su valor residual es una parte importante del coste de explotación. Hay que considerar que algunas garantías extendidas vencen cuando la carretilla se vende. Es mejor que busque una póliza que pueda transferirse al nuevo propietario, lo que incrementará el valor de revent a. Considérelo dinero en efectivo.

Lo esencial

Incluso en el caso de una carretilla fiable, una buena garantía extendida evita costes no programados, protege su negocio y le garantiza su tranquilidad, especialmente después de tres, cuatro o cinco años. Si el fabricante no le ofrece la póliza que necesita, pregúntese por qué.

¿Qué valor le merecen las garantías de Mitsubishi?