El auge de las máquinas: ¿son siempre sustituibles las carretillas por robots?

Parece inevitable. Si creemos a los numerosos expertos que hablan en revistas, sitios web y periódicos, todo jefe de almacén que quiera sobrevivir debería prepararse para incorporar la automatización y los robots en la actividad diaria de su almacén. Pero ¿es la automatización la única respuesta? ¿Hace falta deshacerse de las carretillas elevadoras y de otros sistemas de almacén fiables para competir? Para encontrar la respuesta, analizaremos este tema desde tres perspectivas diferentes.

1. ¿Qué funciones desempeñan los robots?

En realidad, el término «robot» incluye muchos tipos de máquinas diferentes. En logística, los robots pueden utilizarse como medio (interno) de transporte, herramienta de reparto (transportando alimentos, por ejemplo), herramienta de recogida en entornos de preparación de pedidos sueltos y, finalmente, como aplicación AGV. Un AGV es un vehículo de guiado automático que puede describirse como un híbrido entre una carretilla elevadora y un robot. De hecho, supera la limitación que tienen la mayoría de los robots: no constituir una solución de elevación. Dicho esto, podemos concluir que solo los AGV especializados en soluciones de manipulación de materiales pueden competir con (algunas) de las actividades de las carretillas actuales.

2. ¿Qué tipos de actividades de almacén facilitan los robots?

Para que la inversión sea rentable, un robot tiene que estar trabajando constantemente. A continuación examinamos el volumen de actividad en el almacén en cuatro categorías de empresa diferentes. No está incluido el almacenamiento por tratarse de una actividad «estática».

Fuente: Roadmap Robotics in warehousing (Logistiek.nl). Las cifras representan porcentajes de actividad.

Al necesitar una productividad constante, los robots o las soluciones automatizadas solo pueden utilizarse en las áreas en verde. En pocas palabras, el trabajo debe ser repetitivo para ser «programable». Aun en estos casos, hace falta analizar debidamente en profundidad si es oportuno realizar una inversión tan importante. A veces, por el contrario, la respuesta se encuentra en hacer pequeñas mejoras ajustando procesos o utilizando otros dispositivos de manipulación de materiales. Todas las demás áreas se siguen beneficiando con la manipulación fiable de las carretillas elevadoras o las transpaletas.

3. ¿Cuál es el panorama general?

La automatización del almacén puede comportar numerosas ventajas, como mayores niveles de servicio, menos errores en la preparación de pedidos o menos costes operativos. Pero la cuestión básica nunca debería ser si hay que plantearse el uso de robots. Los jefes de almacén deben analizar periódicamente la estrategia general del negocio y valorar si la operativa logística la favorece. Deben examinar la cadena de suministros. Deben de tener en cuenta los cambios que experimentan sus mercados, el comportamiento de los usuarios, la gama de productos, los puntos de distribución, el transporte y el embalaje. Solamente realizando el análisis correspondiente sabrá si necesita adaptar sus operaciones y posiblemente hacer uso de nuevas tecnologías. En la mayoría de los casos, basta con realizar mejoras relativamente pequeñas pero inteligentes para generar un ahorro considerable sin rinunciar a la productividad.

• Acciones
• Describa todos sus procesos de logística y evalúe si todavía encajan bien en la estrategia general del negocio
• Deje que su proveedor de carretillas elevadoras evalúe su flota actual de equipos de manutención de materiales con respecto a sus actividades de logística y asegúrese de utilizar las carretillas adecuadas para las aplicaciones correctas
• Visite de vez en cuando las ferias de logística para mantenerse al día